jueves, 31 de marzo de 2011

Mirada de niño

Su mirada se asomaba por el borde de la ventana. Sus sueños volaban libres, una noche más se acercaba y el se aprestaba a enfrentarla. Tomó su lanza, trepó altos árboles, luchó contra dragones y llegó allí, a su reino, de donde nadie podía sacarlo excepto esa maldita chicharra y la dulce voz de su mamá. Nunca entendería a aquellas personas que apuradas corrían y corrían sin parar. Los helados, los caramelos, la televisión...¿es que aquello era crecer?
Los ángeles lo saludaban, sus héroes le sonreían y alentaban, su mundo florecía y decaía a su placer. El tiempo y el espacio no existían, todo sucedía en su reino, ese fabuloso reino.
La chicharra suena, la voz de su mama ya está ausente, es hora de empezar otro nuevo día.

3 comentarios:

  1. yo aun no pierdo mis sueños, afortunadamente este refugio de fantasía aun me visita de noche, claro que ahora me doy cuenta de cuando sueño y puedo dirigir la dirección de los mismos, pero siguen siendo tan hermosos y reconfortantes como siempre ^^

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  2. Lo bueno es cuando uno puede soñar despierto y dejar que las fantasías e ilusiones nos mantengan vivos.

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  3. A veces miro a mis hijos, su frescura al mirar al mundo y deseo con todo mi corazón que la mantengan toda su vida !!! La vida es hermosa, nosotros nos encargamos de hacerla mas difícil.

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